La libertad de la Democracia
El maquiavelismo politico utiliza muy menudo seres humanos, ciudadanos -maldad que esta en su codigo genetico – como instrumentos para sus fines. Claro, esta afirmacion pareceria sonar demasiado brutal en una democracia y, por lo tanto, debia reservarse para dictaduras. Y ciertamente, lo es. Las dictaduras, de derecha o de izquierda – son lo mismo – les interesa acumular poder y nada mas. Ese es el fin que determina los medios, la estrategia, la tactica de sus acolitos La verdad de lo que decimos, no obstante su pobreza moral, permanece; el maquiavelismo mira a los ciudadanos como instrumentos, dejando de lado la naturaleza de lo que son en si , personas con un fin en si mismas.
Pero ese traspie etico tambien es propio de la democracia. No se crea que la misma, por la reverencia cuasi-religiosa de que disfruta, esta exenta del virus manipulador.. Lejos de la realidad de las cosas. La libertad de una una democracia tambien puede utilizarse como un fin absoluto sin parar mientes en la dignidad personal de los ciudadanos, Y eso es, precisamente, lo que ocurre en ciertos contenidos de la libertad, o liberales, de la democracia actual. Pero vayamos por parte. Que quiere decir eso de que la libertad corrompe a la democracia? Significa dos cuestiones fundamentales en la democracia liberal contemporanea
Lo primero, que la libertad del individuo, de la persona – el sujeto individual de una democracia para que sea liberal – supone ser algo antes de ejercer dicha facultad. El ser humano es algo antes de ser libre. O tal vez seria mejor decir; la persona es libre pues primero es persona. Una piedra y un yacare no son libres, por lo menos, no poseen la libertad interior de un querer conciente de formar una comunidad para el bien comun. El determinismo material en el primero o el instinto de conservacion en el segundo, le juegan una mala pasada. Pero el ser humano no. Tiene la bendicion en su naturaleza de determinar su propia accionar.
Pero aqui viene lo segundo. Y es que ese accionar sigue – con la exuberancia parecida a la de las ramas de un ombu que indicarian sus raices – de manera organica. La persona ejerce su libertad y es mas libre – cuando mas obedece a su propio ser, su naturaleza. Pero la democracia actual – o ciertas versiones secularistas de la misma – traicionan esta realidad. Es que la version de la libertad esgrimida es, por la traicion a la naturaleza de la persona que hace, enemiga de si misma. La version de la libertad invocada por ciertos contenidos de la democracia liberal actual hace que las identidades de los grupos que la conforman, sean instituciones educacionales, iglesias, o asociaciones profesionales, se diluyan, se evaporen, se nieguen a ser ellos mismos.
Ese es el totalitarismo en nombre de la libertad. Es una de las nuevas tiranias, tal vez mas insidiosa pues se la impulsa en nombre de la democracia. No es la libertad de la persona para ser mas ella misma sino una libertad contra la persona. La libertad es lo que el individuo quiere – o lo que la mayoria o el poder decida – cualquiera sea su apetito y todo aquel que no se apee al querer sera expulsado o burlado o ignorado por la nueva intelligentzia. Eso es lo que ocurre con el contenido ideologico de genero de la democracia; si no se esta de acuerdo, entonces, no se es democratico sino intolerante, autoritario, reaccionario y rapaz.
Convengamos; no es un maquiavelismo duro sino blando, pero, por lo mismo, no deja de ser absolutista. Es la intolerancia en nombre de la tolerancia, la marginacion social en nombre de la inclusion. No importa si lo que se critica es una exegesis de la libertad que quiere hacer creer que el ser vivo no es siempre persona o que lo mascualino a veces es femenino o vice versa. O que se lo constuye como tal conforme las ciencias sociales lo dictaminen, Lo unico que vale, en fin, es lo que la mayoria dice que le gusta o le parece aunque lo dicho sea contrario a ese algo de la persona. Y asi, se inventa, se fabrica, se falsea la realidad. . Pero esa no es toda la historia. Existe otra historia, la de una democracia, que es liberal porque tiene límites, posee fronteras de la propia naturaleza de la persona y de moralidad del ciudadano.
Mario Ramos-Reyes